domingo, 17 de junio de 2018

Nadien rempuje a nadien

"Nadien" y "naiden" eran palabras correctas, y "nadie" era vulgarismo que después se impuso. Aquéllas se observan aún en comunidades campesinas o lejanas a centros de estudio. Vea el castizo castellano antiguo de El Quijote: Allí, el hidalgo pide que "nadien rempuje a nadien"... Por cierto, "rempujar" también era correcto... Los idiomas vivos son propiedad de los hablantes, no de las normas escritas en cada una de las épocas históricas. Por eso se distinguen de las (adecuadamente llamadas) "lenguas muertas". El uso de los idiomas está preñado de ejemplos como éste, normalmente desconocidos incluso por quienes se afanan por la ortografía y, peor aún, por corregir a los demás. No existe eso de hablar bien o hablar mal. En el caso del idioma español, ni siquiera en España se puede delimitar con claridad la frontera de este idioma, y por eso hay mezclas, remezclas, y préstamos de aquí y de allá. En lo que a mi respecta, eso es hermoso. Cuando viajo por ahí, nunca olvido mi radio de bolsillo, para escuchar acentos y palabras multicolores.



2 comentarios:

  1. Sat nam, que entretenido volver a leer una entrada suya y siempre interesante. Sus letras me suenan mas vivas y con felicidad renovada Años que no visitaba su blog. Años como cuando yo hiba en la u y lo conoci marchando por la alameda.
    Un abrazo

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  2. Wow. Entonces fue hace bastante tiempo. Veré qué encuentro en tu blog. Un abrazo.

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